La Gruta
Oscura
Simón, Jaime, Arturo y Clara se disponían a
explorar los secretos de la montaña fría, un lugar situado muy al norte de la
ciudad, una montaña enorme situada al centro del bosque de las flores, un lugar
muy poco explorado y hasta peligroso debido al frío descomunal que azotaba la
región, la gente del pueblo aledaño evitaba a toda costa el contacto con el
bosque y no se diga con la montaña y con las grutas que se formaban en la base
de la misma. Pero a los jóvenes poco les importaban las supersticiones, las
consideraban invenciones de los campesinos, pero algo era cierto, el clima de
ese lugar era totalmente atípico e iba en contra de todo el clima cálido de los
pueblos a su alrededor.
Los jóvenes atravesaban el gélido bosque con el
entusiasmo de explorar la inexplorada montaña, iban en una poderosa camioneta
todo terreno por un camino antiguo que se había construido muchos años antes
por manos obreras y no sabían exactamente donde terminaba, esperaban que por lo
menos atravesara la mitad del bosque, afortunadamente el camino corría largo y
tendido hasta unos cuantos metros de la montaña, aparcaron el carro, recogieron
sus maletas previamente equipadas con todo lo necesario para la exploración de
las grutas, así también bajaron todos los viveres que pudieron ya que el
trabajo de exploración los tendría cansados para el atardecer y querían tener
algo que comer.
Después de cuarenta minutos de caminata
llegaron a la base de la montaña y se dispusieron a rodearla en busca de la
gruta más grande, una famosa y enorme grut bautizada por los pueblerinos como
la gruta obscura, no fue difícil de encontrar, era un enorme agujero en los
pies de la montaña, una caverna enorme con letreros espaciados a su alrededor.
Los letreros decían, ¡Peligro!, No entre zona
peligrosa, ¡Aléjese!
Los pueblerinos se tomaban muy en serio sus
propias leyendas, pero los jóvenes se sentían sumamente emocionados por ser los
primeros espeleólogos en investigar el lugar y era muy sorprendente que nadie
antes la hubiera explorado tomando en cuenta el sencillo acceso, incluso había
un camino a través del bosque y señalizaciones para encontrarla con relativa
facilidad, ellos habían explorado otras montañas y cuevas donde el acceso era
tan complejo que el helicóptero era la única opción, Se pusieron manos a la
obra y trazaron un plan de exploración.
Jaime o James como le gustaba que lo llamaran
era el típico chico rudo y valentón, Simón y Arturo eran más maduros e
inteligentes, además eran los más experimentados en las ciencias de la exploración
de cuevas, cavernas, grutas, cenotes y Clara al igual que James solo iban por
gusto, en afán de pasar un buen rato entre amigos y entre ellos como pareja
además ambos eran apasionados por los deportes extremos.
Antes de entrar a la cueva escucharon con
asombro que la leyenda se volvía realidad, un potente grito desgarrador y agudo
salió de las puertas de la gruta obscura, al instante un segundo aullido resonó
en las paredes exteriores de la gruta y un tercer grito ahora grave, tosco y
enloquecedor provino de lo más profundo de la montaña.
Los jóvenes quedaron como estatuas escuchando
semejante sinfonía, jamás en su carrera habían escuchado algo similar. Quedaron
estupefactos por unos minutos hasta que escucharon un galopar fuerte,
retumbante, era como un caballo enorme aproximándose hacia la gruta y mientras
se dejaba venir relinchaba de una manera enloquecedora, un relinche humanoide
tan vomitivo que los jóvenes solo pudieron reaccionar de la manera más natural
corriendo sin control a toda velocidad hacia el carro, pero algo raro estaba
pasando, el bosque se veía más negro y frondoso que cuando llegaron al píe de
la montaña, el camino ya no estaba definido, parecía estar bifurcado en varios
senderos que guiaban a puntos muertos, finalmente quedaron atrapados entre la
montaña y un frondoso bosque de difícil acceso, no había rastro del camino
original y lo más aberrante sucedió frente a sus ojos, el bosque se había
multiplicado, un enorme árbol con un tronco color negro petróleo emergió del
suelo, seguido de otros dos y luego cuatro, así hasta que no hubo manera de
cruzar el bosque. Aterrados por lo inverosímil de la situación, se echaron a
correr en dirección a la gruta, llegaron a un punto que parecía seguro y se
sentaron en las piedras a evaluar la situación.
James comenzó.
-¿Qué demonios ha sido toda esa mierda?, ¿Qué
paso con mi cabrona camioneta?, ¡¿Vieron el puto árbol como salió del suelo?!,
¿Y esos sonidos en la gruta?, ¿Díganme que escucharon como venía encarrerado el
puto ese?
Clara lloraba desconsoladamente y emitía
sonidos ininteligibles, Arturo jadeaba de tanto correr.
-Cálmense todos –sugirió Simón- tenemos que
encontrar la camioneta, si no, nos espera una enorme caminata de regreso.
-¡No me digas! ¿¡Qué no estás viendo cómo
crecen los arboles ochocientas veces más rápido de lo normal!? ¿Y lo más
inteligente que se te ocurre es recordarnos lo jodidos que estamos? Seguramente
mi camioneta está hecha mierda, ya me la imagino perforada por los cabrones
pinos del infierno.
-No es momento para pelear –dijo Arturo- mejor
revisen los radios o sus celulares a ver si hay señal o algo.
-De eso es de lo que estoy hablando, ideas
prácticas, imbécil. Eres un cabron genio.
Revisaron radios y teléfonos pero la señal era
optima, a pesar de eso no había manera de conectarse a internet o realizar
llamadas, el radio después de muchos intentos capto una frecuencia,
lamentablemente era pura estática.
-Bueno todo se ve más tranquilo, voy a echar
una meada.
James dijo esto y camino hacia un cumulo de
piedras grandes, Clara ya estaba más tranquila y se puso su sudadera ya que el
frio empezó a arreciar al pie de la montaña. Mientras tanto Simón y Arturo
seguían intentando con el radio, de pronto regreso James acelerado.
-Miren esta mierda que encontré entre las
piedras, por poco y lo meo todo –río- parece ser una especia de diario o algo
así, ¿Qué coño haría esto aquí?
Le entrego el diario a Arturo y se sentó junto
a Clara, la abrazo y la consoló mientras Arturo y Simón revisaban el objeto.
Parecía ser muy viejo, estaba en muy mal estado pero el contenido parecía
divisible en su mayoría. Arturo se sentó en una piedra y comenzó a leer.
“Estoy dispuesto a investigar los misterios que
esconde la montaña fría y el bosque de las flores, para esto me instale hace ya
seis meses en el letárgico pueblo de “Parcela Verde” el más cercano a la
montaña, pero más bien debería llamarse parcela hedionda o la parcela del
aburrimiento, aquí la gente es muy rara y tienen miedo de todo, me estoy
documentando de toda su información veraz, la cual es muy nula, todo gira en torno
a leyendas, aunque hay ciertos casos que llamaron mi atención de inmediato, el
caso de los niños sin retorno y el de la pareja de extranjeros que desapareció
sin dejar rastro.
El primer caso es sumamente oscuro, tanto así
que pienso que los niños más bien fueron asesinados y deformados. Cuentan que
un padre llevo a sus tres hijos de paseo por el bosque con el afán de
explorarlo, pero el padre no calculo la distancia recorrida y quedaron muy
cercanos a la montaña, cuentan que el padre se tendió en el suelo y dejo a sus
hijos explorar por ahí cerca, solo dormiría media hora e iría por sus hijos
para comer lo que traía, la sorpresa fue terrible cuando el hombre despertó en
plena noche y a cierta distancia de donde se quedó dormido, el hombre histérico volvió a buscar su
automóvil y busco toda la noche hasta que al pie de la montaña encontró una
demencial efigie erguida con los cuerpos sin vida de sus tres hijos, los
troncos juntos, los brazos y piernas a manera de patas y las tres cabezas en
forma de triángulo, formando la imagen de un demencial arácnido humano.
El otro caso es sustancialmente más oscuro y
xenófobo a mi juicio, ya que involucra a una joven pareja de extranjeros. Nadie
fue capaz de decirme de dónde venían estas personas pero yo intuí que de alguna
parte del sur de América o de España ya que hablaban español como lengua
materna. Dicen que los jóvenes llegaron al pueblo a vacacionar un verano hace
ya un buen tiempo y se la pasaron tan bien en este lugar (seguramente estaban
drogados los infelices) que al verano siguiente volvieron, compraron una
casucha vieja, la demolieron para construirse un palacio celestial en el pueblo
y a partir de ahí venían a la casa cada que podían para quedarse largas temporadas.
Era bien sabido el gusto de “los güeros” (que era como la gente se refiere a
ellos), por las leyendas y misterios que envolvían el bosque de las flores,
también era bien sabido que daban largos recorridos por el bosque casi llegando
a la montaña y más de una vez desaparecieron dos o tres días, por eso aquel día
no les extraño a los pueblerinos que se desaparecieran cinco días, la
preocupación comenzó cuando quince días habían pasado y no habían vuelto ni
parecía que se hubieran ido de regreso a su país ya que en la casa aún seguía
su automóvil y todas sus cosas también seguían en la casa. Los pueblerinos más
allegados decidieron emprender una búsqueda improvisada por el bosque, pero
solo eran unas ocho personas las que se atrevieron a entrar en el bosque, se
internaron mucho en cuatro grupos diferentes y no encontraron gran cosa hasta
el tercer día de búsqueda, ya habían recorrido todo el bosque de cabo a rabo,
pero no el área de la montaña, ahí afuera de la gruta oscura encontraron al
güero desnudo, muy sucio, parecía incluso que estaba muy lastimado, no se movía
ni parecía estar conciente de nada y
frente a él estaba la güera, o lo que quedaba de ella, cuentan los nauseabundos
pueblerinos que la mujer estaba irreconocible, parecía ser que el hombre había
descubierto su gusto por la carne humana y se había comido a su esposa con todo
y ropa, solo algo no concordaba, el tipo no tenía señales de haber comido
recientemente, no tenía sangre en su cuerpo, ni en los dientes, tampoco
presentaba signos de haber peleado con una persona, más bien parecía que se
había peleado con un oso ya que tenía casi todos los huesos rotos, severas
heridas internas y múltiples lesiones en la piel y músculos, aun así había
aguantado quizá varios días sentado en una piedra frente al cadáver medio
devorado de su mujer y había vivido para contarlo, excepto que el tipo no lo
conto jamás, al llegar con el doctor del pueblo el hombre murió de inmediato
sin pronunciar ni una sola palabra, el dictamen final es confuso e improbable
ya que sugiere que en algún momento dado, la pareja se vio acechada por algún
animal y fueron forzados a entrar a la gruta, al no tener recursos suficientes
la pareja decidió salir solo para darse cuenta de que su perseguidor seguía
afuera esperándolos, luego el hombre quiso defender a su mujer y fue
severamente lesionado al tiempo que su esposa era devorada por algún animal.
Esta teoría es totalmente improbable y todos en el pueblo lo saben, pero aun
así es la historia oficial de lo que le pasó a los güeros. En primera, ¿Qué
clase de animal podría haber causado esas lesiones?, segunda, ¿Por qué no se lo
comieron a él también? Y tercera, ¿Por qué el animal se tornó tan persistente?,
al grado de seguirlos hasta la gruta y prácticamente acampar hasta que volvieran
a salir, mi teoría personal es que los pueblerinos fueron los ejecutores de tan
terrible situación, pero aun no tengo pruebas para acusar a nadie.
En fin, esto es muy interesante y pienso
investigarlo a fondo, tal vez hoy o mañana me internare en el bosque con dos
pueblerinos que me quieren ayudar. Espero encontrar algo bueno en esa zona, ya
que la gente de aquí le tiene un pavor autentico…”
-Hasta aquí se puede leer-dijo Arturo
Clara estaba ahora calmada, pero el terror
estaba tatuado en su rostro más que cualquier otra cosa, abrazo a James
mientras Simón se sobaba la cabeza compulsivamente con las dos manos en un
genuino gesto de desesperación, Arturo cerro el diario, lo guardo en su mochila
y dijo.
-Bueno, si algo de lo que relata ese diario es
cierto, estamos en un lugar muy peligroso, finalmente todas esas historias que
nos contaron podrían tener algo de cierto, hay que salir de aquí a como dé
lugar.
Simón dejo de sobarse la cabeza y dijo
angustiado.
-¿Y como se supone que vamos a salir de aquí
con vida? No hay manera de regresar por el bosque sin que los arboles nos
empalen al caminar por ahí, podríamos tratar de subir la montaña pero no sería muy
prudente tomando en cuenta que se ve que no tarda en caer una horrible
tormenta, no nos va a quedar otra opción más que adentrarnos en la gruta.
James le respondió
-Es lo más lógico, pero acuérdate del ruido ese
que escuchamos ahí adentro, estoy seguro que en ese lugar hay algún tipo de
monstruo o algo así, deberíamos acampar aquí afuera a ver si en un rato se
despeja el bosque y lo podemos atravesar, o intentamos subir por la montaña,
pero ahí adentro no es seguro.
Por primera vez clara sugirió algo.
-Yo propongo que entremos, me dan mucho miedo
esos árboles, esto es algo muy malo, estamos metidos en algo horrible y quiero
estar lo más segura posible, en la cueva me sentiré más segura y por lo menos
ya no nos mojaremos por la lluvia.
Pero antes de que pudieran tomar alguna
decisión la tormenta azoto la base de la montaña, en cuestión de segundos se
dejó caer una brutal tormenta con granizo pesado y vientos poderosos.
No les quedó más remedio que tomar sus cosas e
internarse en la gruta de una sola vez.
Entraron corriendo y al momento encendieron sus
linternas para poder iluminar sus caminos, los jóvenes cargaban lámparas de
alto poder que juntas iluminaban de una manera muy amplia los recovecos de la
gruta. Lo primero que notaron fue que esta tenía una altura impresionante y que
en el techo de esta había gran cantidad de estalactitas gigantes que parecía podrían
caer en cualquier momento sobre ellos, continuaron avanzando lentamente y
mientras más se internaban el lugar se iba modificando de una manera
radicalmente extravagante, el amplio espacio que habia en los primeros metros
de la entrada se tornaba aun mayor conforme caminaban hacia las profundidades
de la gruta, esto generaba que la gruta se hiciera cada ves mas dificil de
iluminar, avanzaron tal vez unos doscientos metros hacia adentro y llego el
punto en que el espacio era tan amplio que las lamparas aun apuntando juntas al
mismo punto no lograban iluminar casi nada, el techo de la gruta ya no se veia
ni nada de lo que estuviera al frente era perceptible tampoco, James dijo
impaciente.
-Esto es lo mas raro que he visto en mi vida,
es como si hubieramos entrado a otro lado que no fuera la gruta, deberiamos
regresar. Esto no tiene sentido alguno, es como si la montaña estubiera
totalmente hueca.
-Tienes toda la razón James -dijo Simon-
ninguna cueva, caverna o nada que haya explorado jamas ha tenido este nivel de
expansion interna, es como haber entrado a una de esas tiendas de campaña
magicas que por fuera eran miniaturas y por dentro tenian el tamaño de un
departamento pequeño, de algun libro de magos que alguna ves leí.
Clara dijo:
-Esto es algo espantoso, este lugar no tienen
la más minima logica. Regresemos y esperemos a que pase la torementa, si
seguimos avanzando nos perderemos en la inmensidad de esta caverna.
Se disponian a regresar cuando una voz algo
apagada pero que no era de los cuatro miembros del grupo susurro desde algun
punto cercano.
-Vayanse rapido, moriran todos y seran
digeridos por las entrañas de la gruta, no hay…
Vayanse pronto, corran despavoridos porque el
ya viene… El jamas perdona ni deja a nadie vivo… ¡Vayanse les digo! ¡Vayanse
ya!
Los jovenes asustados no lograron divisar de
donde venia ese sonido pero el mensaje habia sido muy claro querian que se
fueran del sitio de inmediato. James apuntaba como loco a todas direcciones
pero no lograba ver nada en absoluto, ni las paredes de la montaña, ni su
techo, es más, la oscuridad era tan inmersiva que inlcuso al apuntarle a sus
propios amigos no lograba apreciar del todo sus facciones, entonces saco su
camara y decidio comenzar una grabación con la opcion de visión nocturna activada,
logro ver a sus compañeros repartidos en diversos puntos no muy lejos de su
posicion y les grito.
-¡Chicos, pongan sus camaras en vision nocturna!,
¡Ahora vamos a formar un circulo, todos espalda con espalda y avancemos de esa
manera, así ningun loco montañes nos tomara por sorpresa!
Las instrucciones de James se llevaron a cabo
de inmediato, se pusieron en circulos y comenzaron a retroceder lentamente de
esa manera. Pero no llegaban a ningun lugar, el espacio en el que caminaban se
hacia eterno, decidieron deshacer el circulo y caminar en grupos de dos, James
con Clara y Simon con Arturo. Pero todos los esfuerzos que se hacian eran
infructuosos, habian llegado a un lugar tan oscuro e impreciso que ni la vision
nocturna logro penetrar. Decidieron tomar un descanso en ese punto para despues
retomar la caminata.
En este punto Jaime exploto y comenzo a
reprocharles la idea de internarse en la gruta:
-¿De quien fue la maldita idea de entrar a
explorar esta mierda de cueva?
Pero James reacciono inmediatamente.
-Por si no lo recuerdas imbecil este era el
maldito plan de venir aquí, entrar y explorar la maldita gruta, ahora deja de
lloriquiear como siempre y propon algo util. ¡Oh! Se me olvidaba, eres un
estupido sin imaginación…
-Vuelve a decir eso y te voy a romper…
-¿Qué me vas a romper imbecil?
Arturo intervino para calmar la situación.
-Calmense tontos, tenemos que salir de aquí a
como de lugar, no se si lo han notado pero
esta maldita oscuridad no es natural, ni en la cueva mas profunda a la
que he entrado habia visto oscuridad tan densa como la que nos rodea.
-Yo habia escuchado hablar de este tipo de
fenomeno, mi padre colecciona muchos libros de leyendas de terror y situaciones
paranormales pero ninguno le habia fascinado tanto como el cuento que habla
sobre la oscuridad infinita de Brath-Khul. Mi padre siempre nos contaba que ese
libro era unico en el mundo, jamas habia encontrado registro ni del autor, ni
de la editorial, ni jamas habia encontrado otras copias del mismo, lo habia
comprado en uno de sus viajes a alguna ciudad de latinoamerica, mi padre decia
que este libro era autentico y que sus historias eran fascinantes porque eran
reales. Naturalmete La oscuridad infinita de Brath-Khul era su historia
favorita de ese libro y la contaba con alegria cada que podia. Esta historia
relataba la existencia de un ser viejo, mas antiguo que el mar y la tierra, mas
antiguo que dios o el diablo, una verdadera reliquia de antaño que moraba en la
incipiente tierra a unos cuantos años de su creación, este ser siempre a estado
en la tierra y vive en las montañas, bosques o desiertos. Según las historias
de mi padre Brath-Khul tenia la habilidad de generar oscuridad en todo momento,
podia undir en las penmbras bosques enteros aun estando en pleno dia y su
principal objetivo es el de torturar humanos para su propia diversión y
comerselos. Su forma era inexacta ya que según dicen puede tomar la apariencia
que el quiera y puede hacer aparecer criaturas o cosas que lo ayuden a llevar a
cabo sus fechorias.
Todos se quedaron helados e inmobiles al
escuchar el relato de Clara ya que lo que les estaba ocurriendo parecia ser
obra aquel ser del relato, la oscuridad era tan densa que casi se podia tocar
con las manos, habian sido obligados a entrar casi a la fuerza a la gruta y se
habia generado un ambiente propicio para perderse en segundos.
-Muy bien, ¿pero ahora que van a hacer?
Los jovenes se percataron de que una persona
extra estaba con ellos y era dificil calcular cuanto tiempo llevaba ahí
escuchando y siguiendo sus pasos.
-¿Quien eres?-replico Arturo-
-¿Recuerdan el diario que encontraron afuera?
Me pertenecia cuando estaba vivo, ahora solo soy un espectro, no estoy con vida
pero tampoco estoy muerto, vine aquí hace tiempo y solo encontre mi perdición.
James respondio:
-¿Y esperas que creamos esa mierda? Dinos como
salir de aquí imbecil, hemos estado caminando en circulo o algo así, este lugar
es una inmensidad.
-Bueno James, dudo mucho que puedan salir de
aquí, esta gruta es diferente para todos los que se internan en ella y si el no
quiere que salgan no van a salir.
-¿Quién es el? ¿De que hablas amigo?
-Tu novia ya lo ilustro como se debe, en esta
montaña vive un ser cuya voluntad va mas allá de la imaginación, Brath-Khul es
el dios de las tinieblas y no es esa clase de dios benevolo dispuesto a salvar
a la humanidad, sino todo lo contrario.
-Ya me tienen hasta la mierda con ese
Brath-Khul, si un pendejo como ese en verdad existiera ya nos habria matado.
Así que dinos ahora como salir de aquí o te voy a terminar de matar maldito.
-No hay manera de salir de aquí jovenes y
escuche su debate acerca de si haber entrado aquí era un error o no, dejenme
enclarecer que nuestro amigo tenebroso nunca hace nada sin razón alguna, si
estan aquí es porque el así lo quizo, nunca estuvo en sus manos la facultad de
tomar decisiones así que no hay razon para discutir, sus vidas fueron
arrebatadas desde que entraron al bosque, a partie de ahí nada ha estado en sus
manos.
-¡Callate Maldito! …
Las palabras de James se vieron opacadas por el
sonido de un gruñido poderoso que venia desde lo mas profundo de la gruta,
lograron escuchar el cabalgar espectral de nuevo y esta ves no tuvieron opcion
mas que correr entre las penumbras en diversas direcciones, James corrio junto
con Arturo, Clara corrio hacia otra dirección creyendo que seguia los pasos de
James y Simon corrio directo a donde venia la criatura pensando que se alejaba
de ella, solo logro ver a una inmensa bestia atravesar la gruta, una criatura
cuya forma era inenarrable, insoportable, desconocida para todos los ojos
humanos, tenia cuerpo de mujer fornida y gigante, con patas largas, fornidas
como las de un caballo, un par de pechos de mujer grandes y aparentemente
firmes, tenia una enorme cara de toro y unos cuernos largos y negros. Fue lo
ultimo que pudo ver Simon ya que al voltear con su camara hacia donde se
dirigia ese ser solo pudo verlo viniendo hacia el de frente y con una velocidad
maxima, la criatura lo alzo con un brazo como si se tratara de cualquier cosa,
y con movimientos frenetocos lo azoto multiples veces contra el suelo hasta que
de Simon no quedaron mas que un monton de extremidades y organos esparcidos por
todo el lugar.
James y Arturo fueron testigos de la terrible
muerte que habia sufrido Simon así que siguieron corriendo despavoridos con el
sonido del galopeo firme y creciente a sus espaldas, afortunadamente la
oscuridad se habia disipado un poco y podian ver a traves de sus camaras con
bastante claridad, de un momento a otro Arturo fue alcanzado por la bestia y fue
pesadamente embestido por esta, el golpe fue tan severo que Arturo volo varios
metros solo para aterrizar de cabeza contra el suelo seco de la gruta.
James no lo podia creer, esa bestia era real y
venia por el, acelero lo mas que pudo hasta que logro ver una luz a traves de
la camara, siguio corriendo cada ves mas veloz y mientras mas se acercaba mejor
era la vision dentro de la gruta, ahora incluso lograba ver sin necesidad de
usar la camara, estaba a pocos metros de la fuente de luz cuando el camino se acabo
de pronto y James cayo por un presipicio inmenso hasta que encontro su muerte
contra el fondo de la montaña, la camara quedo grabando hacia arriba y se pudo
divisar como la fuente de luz se atenuaba hasta desaparecer solo para demostrar
que James habia sido llevado a su perdición.
Clara corria a ciegas sin saber que era la
ultima persona viva de su equipo, gritaba los nombres de los jovenes pero solo
respondia el eco fuerte de su voz, de pronto llego a un lugar estrecho y
complejo donde la oscuridad se habia normalizado y se podia ver con claridad
incluso sin usar la camara, ni la lampara, Clara volteo para observar de donde
venia pero parecia haberse transportado a esa zona ya que no habia ningun
rastro de la horrible amplitud a traves de la que habia corrido, Clara comenzo
a avanzar con miedo y siguio gritando en sollozos los nombres de sus amigos sin
respuesta alguna hasta que de alguna esquina de ese laberintico complejo de
pasillos surgio un hombre que se veia bastante desgarbado y sucio, Clara se
alerto y se dispuso a escapar de este pero se tranquilizo al escuchar su voz y
comprobar que era aquella persona que habia hablado con ellos anteriormente.
-Fui un idiota, me creeia tan superior, cuando
llegue aquí instale un campamento afuera de la gruta, al caer la noche todos
los demas que me acompañaban dormian y la gruta me hablaba, era la voz de mi
madre, me llamaba con ternura y me decia cosas hermosas, en ese momento decidi
entrar a la gruta en busca de mi madre, ella murio cuando era pequeño y encontraba
reconfortante poder hablar de nuevo con ella. Lo que encontre fue aun mejor de
lo que esperaba, era mi madre con una larga tunica rodeada de una inmensa
fuente, me acerque para abrazarla pero lo ultimo que recuerdo fue que la linda
imagen de ella se fundia como un color que se difumina de una pintura y en su
lugar me encontraba a escasos centimetros de una criatura de cuerpo femenino
con cara de toro que dio un paso hacia mi y me devoro la mitad del cuerpo en un
solo movimiento. No me explico que fue lo que paso despues, no se si soy un
fantasma o si soy algo mas que eso, pero llevo aquí mucho tiempo y he visto a
muchos otros morir y ser devorados por la oscuridad.
-Dime espectro, ¿Que es este lugar?, ¿Alguien
ha sobrevivido alguna vez aquí?, ¿Morire aquí?
-Te dire algo Clara, este lugar es un infierno
cambiante diferente para todos y esa criatura que ha matado a tus amigos es un
siervo de Brath-Khul, nadie ha sobrevivido aquí mas que mi esencia, no se si
haya otros como yo y temo decirte que sí, moriras aquí como todos los que hemos
entrado a las entrañas de la oscuridad.
Al decir esto el espectro desparecio y el lugar
volvio a cambiar enfrente de los ojos de Clara, una enorme puerta se abrio al
frente y todos los pasillos desaparecieron dejando como unico camino entrar a
la infame puerta. Clara atraveso la puerta y observo un enorme cuarto en el que
se erguian inmensas estatuas de serer abismales con formas que van mas alla de
la imaginación, al centro habia un trono gigante sin nigun ocuapane y a un lado
de este se encontraba aquella criatura espeluznante con forma de mujer y cara
de toro, parecia estar armando algo pero no se lograba apreciar a la perfeccion
lo que era, a medida que se iba acercando Clara pudo notar que esa criatura
estaba creando una escultura con los cuerpos muertos de James, Simon y Arturo,
su terror fue tan amplio que sin darse cuenta de sus acciones comenzo a correr
en direccion a la puerta por la que habia entrado solo para darse cuenta de que
a traves de la puerta se observaba la misma escena que habia dejado atrás al
correr; como lo habia dejado claro el espectro no habia escapatoria.
Clara se arrodillo y comenzo a llorar
desenfrenadamente dandose cuenta de que su fin estaba proximo, no presto
atención a que la criatura se habia perctado de su presencia pero no se habia
inmutado, tampoco se dio cuenta de que a su espalda habia aparecido un hombre
que la veia con indiferencia y no salio de su pena hasta que este le hablo con
una voz muy cordial y natural.
-No te hare daño, ven conmigo.
Clara se calmo pero al ver que aquel hombre se
acercaba lenta pero contundentemente intento correr a traves de la puerta y
gritaba desesperada.
-¡Dejenme en paz!, ¡Por favor, no me haga
daño!, ¡Se lo ruego, se lo suplico!, ¡Dejeme ir, no me mate!, ¡Tenga piedad se
lo pido!
El hombre hizo caso omiso a la histeria de la
joven y le dio alcance con facilidad, la llevo a rastras con suma facilidad, la
coloco en el centro de la estancia y le dijo con firmeza:
-Solo estas aquí porque tienes algo que quiero
para mí, nunca he tenido descendencia y hoy hare de ese hijo que llevas en tu
vientre mi descendencia.
Clara no tenia idea de lo que aquel hombre
hablaba, era un hombre muy, alto delgado, calvo y de piel obscura, vestido en
un traje negro y con gestos muy severos. Rapidamente poso su larga mano sobre
el estomago de Clara, inmediatamente este comenzo a abultarse poco a poco y
Clara sollosaba de una manera desgarradora, en segundos el vientre de Clara
parecia tener un cumulo de tumores terribles que aumentaban en tamaño y de un
momento a otro Clara estaba tan inflamada que su estomago estallo partiendola
por la mitad dejando al descubierto a un pequeño bebé humano que fue
interceptado por aquel hombre. El hombre dijo, tu seras Verihil y esparciras las
tinieblas por todos los rincones de la tierra hasta el final de los tiempos.